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Ciclo “La ciudad, ¿espacio que humaniza?”

La ciudad es el espacio de la vida de muchas personas en nuestro mundo. Es un espacio físico, pero también es una manera vivir (la vida urbana) que no está sólo en núcleos de población de cierto tamaño sino que puede considerarse una característica de la civilización contemporánea….  A través de dos películas analizaremos la vida en la ciudad.

En primer lugar, el viernes 14 de octubre veremos la película estadounidense CRASH (2004). Un film de Paul Haggis que nos cuenta las vidas de varios personajes entrecruzándose. Historias perfectamente hiladas, tremendamente realistas, pues pueden pasar en realidad. Historias que nos susurra, nos habla y nos cuenta cosas sobre los seres humanos. Cosas que seguramente sepamos ya, como que en esta vida no hay dos grupos, el de los buenos y el de los malos. Personajes y situaciones que podemos encontrar por la calle en nuestra ciudad. Una película de gran lucidez por como nos muestra la condición humana similar que todos tenemos independientemente de nuestros rasgos o actividades sociales.  

Nuestra segunda propuesta es la película también norteamericana HER (2013). Conoceremos a Theodore, un hombre que trabaja escribiendo cartas de amor para otras personas y que se ha separado recientemente de su mujer. Theodore decide comprarse un ordenador que se adapta a los gustos y a la personalidad del usuario. Ante este planteamiento, Her no es una película. Es algo mucho más importante que eso. Es un experimento social que aborda al ser humano y al mundo tecnológico en el que vive. La película de una manera muy original e inteligente nos habla del amor y el desamor. ¿Podemos enamorarnos de la voz de un ordenador? La cita para ver esta película original y futurista es el viernes 18 de noviembre.

Y terminamos el trimestre con una cinta del famoso director israelí Eran Riklis. Hablamos de MIS HIJOS (2014), película que veremos el 16 de diciembre. La historia de un joven palestino que va a estudiar a territorio hebreo. Una historia que puede verse como un retrato universal sobre la dificultad de crecer en un mundo que no es el tuyo ni el de tu gente, con valores opuestos, idioma distinto y reglas nuevas, en el que tú eres la excepción, perteneces a la minoría “culpable”.